El precepto religioso de la abstinencia cuaresmal, también llamado "vigilia" o "comer de vigilia", es el fundamento del origen de una gastronomía propia de este tiempo, al que con el paso de los años se le han ido añadiendo una serie de motivaciones tradicionales a las que, por supuesto, también hay que unirle la más importante y que es la riqueza culinaria de nuestra tierra, formando lo que se puede denominar gastronomía cuaresmal.
    Al iniciarse la Cuaresma toda la Región de Murcia entra en ebullición semanasantera. Murcia, Cartagena, Mula, Jumilla... son un hervidero de actos, convocatorias, traslados, recogidas, preparación de túnicas, caramelos... todo envuelto en un aroma de azahar. También es una nota importante las tradiciones culinarias cuaresmales, y en estos días hacemos resucitar las recetas de estos días de Semana Santa.
    Un buen potaje de Cuaresma, un buen bacalao con tomate, bonito con tomate, boquerones, hueva con almendras, unas habas, unos paparajotes, torrijas... son algunos de los platos de estos días. Abstengámonos en Cuaresma de comer tanto producto cárnico. Le haremos un bien a nuestro cuerpo y posiblemente a nuestro espíritu.